martes, 20 de marzo de 2007

Entre querer y poder .

Grito todo el día! quiero hablar para adentro.

(Escuchenme!)

(Pululo por algunos túneles y
me ilumino:
viene una locomotora de frente.)


(No hay paz donde se aparenta tranquilidad,
allí sólo hay indiferencia.)


(Frase suelta del día:
No hay anabólicos para el corazón.)

11 comentarios:

Espirtual Fighter dijo...

¿No hay anábolicos para el corazón?
Ufaaaaaaaaaaaaaaa

aPerfectCrime dijo...

Q tremendo... muy Bueno !!!
La musica es la cura del alma...

Probó la crema
sabe la verdad y está... serena.

En un cuarto lleno de rombos.
Un cuarto lleno de rombos.

Unknown dijo...

No gritarse a uno mismo
aunque sea en voz bajita
de pensamientos bajitos
y razones chiquititas.

No gritarse a uno mismo
cuando viene la locomotora
con el farol grande
los pensamientos aparecen
como puntitos de luz
y se dispersan entre los metales.

No gritarse a uno mismo
porque la locomotora pasó
y nos posamos en los durmientes
la madera no se mueve
el metal de las vías se acomoda
viene la siesta
y todo parece indiferente.

GABU dijo...

¡MENTIRA!
Yo doy fe que hay momentos en que no gritas!jajajajaj

Coincido con vos,"No hay paz donde se aparenta tranquilidad,allí sólo hay indiferencia..."

P.D.:Decime la posta posta,el sábado en ningún momento sentiste una extraña,mágica y envolvente paz interior?

Y si,lamento casi casi confirmarlo pero ese tipo de anabólico no existen,creo que por suerte!

BESAZOOOOOOOOOOOOOOOOOOO

Libelula de Acero dijo...

No hay anabólicos para el corazón y yo me puse a llorar (de verdad verdadera) como una Magdalena que soy...

Living Dead dijo...

El tren viene de frente. Aparentá tranquilidad. No grites.

Sólo un segundo.

Y el corazón ya no duele.

... dijo...

DonFi, lamento informarle que no!

APErfectCrime, creo que sí, la musica es la cura para todo.

Ary, digamelo lentamente, que suena a susurro.

Gabu, dímelo en cámara lenta ;) Juaz.

Libeluliña, no llore, es verdad, no hay más remedio que la verdad.

Living, debía esperar eso de su parte, usted ha pasado bajo la locomotora?




Bexos Maxs!

Living Dead dijo...

Todos los días paso por debajo de una...o dos...o mil.

Pero, como una condena, sigo deambulando por el mundo, enajenado.
Alienado.
Indiferente.

Como un living dead.

No me hagas caso, Lapakita, me gusta abordar la depresión crónica desde su lado creativo.

Soy inofensivo.

Aunque no puedo asegurar que no sea contagioso.

Un beso.

Anónimo dijo...

Exactamente indiferencia, muy bien puesta la palabra.
El día que no grites oirás el murmullo de aullidos como nuevos oyentes.

Muchos besos!

Pablo dijo...

Me encanto la idea de los parentesis.

... dijo...

Living
yo sé
yo sé
yo sé...

Artemis, murmura el mundo en mis orejas, a veces siento el murmullo eterno aplacar el silencio de la indiferencia.

Pablo, enparentados, escondidos, alejados, pero siempre aclarados...


Bexzos!